sábado, 23 de junio de 2007

ESTADOS UNIDOS VS MÉXICO: POR LA SUPREMACÍA DE LA CONCACAF



La hora de demostrar quien es la selección más poderosa de la CONCACAF por fin ha llegado ya que en punto de las 2 de la tarde (hora del centro de México) dará inicio el partido definitivo, el clásico del área, la final de la Copa de Oro 2007 entre México y Estados Unidos, dos equipos que tienen una vieja e histórica rivalidad no sólo en lo deportivo.





Estados Unidos llega como el mejor equipo del torneo, victorias fáciles en primera ronda sin meter el acelerador a fondo, sobre Guatemala, Trinidad y Tobago y El Salvador, y después de derrotar a Panamá 2-1 en cuartos de final arribaba a la semifinal del pasado jueves en Chicago como el candidato más fuerte al título, pero los canadienses se repusieron de una desventaja en el primer tiempo de 2 goles en contra para poner contra las cuerdas al gigante de las barras y las estrellas, anotar el 2-1 faltando menos de 15 minutos para el silbatazo final e incluso aprovechar la expulsiòn de Bradley para irse con todo al ataque y marcar un gol legítimo prácticamente en el último suspiro del encuentro, pero que fue injustamente anulado por la cuarteta arbitral encabezada por el mexicano Armando Archundia por un supuesto fuera de lugar que jamás existió. Pero como se sabía desde un principio, ante la duda todo parece indicar que cualquier árbitro marcaría a favor de México y de Estados Unidos porque son el platillo fuerte de la Copa de Oro. Dejarlos fuera en cualquier instancia antes de la final hubiera representado una enorme pérdida de interés en la gente en suelo norteamericano para asistir a los estadios. Si Archundia no hubiera anulado el gol del empate canadiense, el partido se hubiera ido a tiempos extras y con un hombre más en la cancha seguramente los estadounidenses hubieran perdido el partido por el buen fútbol que estaba mostrando Canadá en los minutos finales, la motivación que representa empatar de esa forma y además tener superioridad numérica, pero el "hubiera" no existe y en términos generales Estados Unidos merecía pasar a la final más que Canadá por el nivel de juego mostrado a lo largo de todos los partidos aunque sin dejar de lado que el equipo de la hoja de maple tuvo una destacadísima actuación y todo parece indicar que en la eliminatoria mundialista será un duro oponente.


Después de ese duelo tan intenso venía el turno de México enfrentando a una sorprendente selección de Guadalupe encabezada por el ex jugador del Inter de Milán y del Valencia, Jocelyn Angloma quien incluso llegó a jugar para Francia partidos de eliminatoria mundialista (no hay que olvidar que Guadalupe es un archipiélago que pertenece a Francia). A pesar de contar entre sus filas con 13 jugadores que han jugado en Europa, la semifinal era más que accesible para México y prueba de ello fue que Oswaldo Sánchez pasó un día de campo de 90 minutos donde apenas hubo alguna llegada de peligro guadalupano, más provocada por el exceso de confianza y las desatenciones de los zagueros mexicanos que por los aciertos de la selección caribeña, aunque hay que reconocer que Guadalupe intentó practicar un fútbol ofensivo sin reservas y con ganas de poner en predicamento al Tri sobre todo en el primer tiempo. Pero México a pesar de una leve mejoría no jugó tan bién como se esperaría que lo hiciera uno de los dos gigantes de la CONCACAF frente a un rival que ni siquiera está reconocido por la FIFA como selección nacional. Tuvo que ser una genialidad de Pavel Pardo quien ya en la segunda parte y ante las fallas claras de Medina y de Bautista, tuvo que meter un verdadero golazo con un disparo desde fuera del área para batir la portería de Guadalupe. Sin convencer el Tricolor logró su pase para la final de la Copa de Oro, lo que finalmente era una obligación para el Pentapichichi y sus dirigidos.


Ahora la pregunta es la siguiente: ¿Podrá México derrotar a Estados Unidos con el nivel mostrado? Desde mi punto de vista no y explicaré por qué. En primer lugar México no está practicando un juego de conjunto, colectivo, aunque hay una leve mejora en el funcionamiento y vemos cómo algunas figuras del equipo como Pardo, Blanco, Borgetti o Salcido pueden sacar algún chispazo de calidad que alcanza para derrotar a rivales más débiles, esto se complica cuando enfrentas a un cuadro que además de tener un estilo de juego que le hace mucho daño a México, le ha tomado la medida ganándole casi todos los juegos que han disputado en los últimos años, sobretodo de local: Estados Unidos. Si a esto le aumentamos los conflictos internos que tiene el Tri y que han salido a la luz pública contundentemente en los últimos días todo parece indicar que el ambiente casero en la selección mexicana no es el adecuado para afrontar la primera final en la era de Hugo Sánchez como entrenador.


Y no es que sea pesimista, ni antipatriota, ni desee que México pierda, pero hay que hablar con la verdad, hay que señalar las cosas tal y como son, sin disfrazarlas. Si hay un favorito en este duelo que se antoja muy parejo por el título de la CONCACAF y el pase a la Copa Confederaciones del 2009 en Sudáfrica ese tiene que ser Estados Unidos porque es un equipo muy sólido que como sea, pero ha ganado todos los partidos que ha tenido en este torneo, está mejor clasificado que México en el ranking mensual de la FIFA (en esta ocasión es más realista) e insisto, Estados Unidos le ha ganado la mayor parte de los enfrentamientos directos al Tricolor y eso lo sabe Hugo porque perdió 2-0 frente a ellos en su primer partido al frente de la selección.


Pero a pesar de que el favorito es Estados Unidos, México tiene la posibilidad de hacer un buen partido, ganar la final y levantar la copa a pesar de su bajo nivel de juego porque muchas veces el deseo de ganar sustituye cualquier cosa y si Hugo logra mentalizar a sus jugadores, pueden darle una sorpresa a Donovan y compañía. Esperemos que sea así porque en caso de que pierda México, el entrenador nacional habrá incumplido uno de los puntos medulares de su campaña de promesas que utilizó para llegar al Tri (además de la campaña de ataques contra Lavolpe) que fue ganarlo todo con México, y si no ganas el torneo de tu confederación que por cierto es la segunda de más bajo nivel en el mundo después de Oceanía, pues entonces no entiendo cómo pretende llegar a una semifinal de Copa América o ganar la Copa del Mundo.


Además tomando en cuenta que Márquez llegó a la concentración diciendo que el Tri estaba mejor con Lavolpe (más tardese le vio discutir en un entrenamiento con Hugo) y dando a entender con sus comentarios de que no había jugado en dos meses que no tiene mucho interés por entrar al campo al menos en la final de la Copa de Oro, que Osorio, Pardo y Salcido hayan pedido no formar parte de la lista de la Copa América para descansar (en los jugadores del Stuttgart se entiende pero en el del PSV hay dudas), que Castillo exponga abiertamente ante los medios su inconformidad por no jugar y para rematar que Hugo haya corrido a su hijo que estaba en la delegación como su invitado por declaraciones que el propio hijo hizo en contra de su padre en ESPN, indica que podría estallar un problemón en el Tri en caso de que Estados Unidos los derrote en Chicago.


También hay que tomar en cuenta que por el lado de Estados Unidos no jugarán Bocanegra, Hedjuk y Bradley por suspensión ni tampoco Torrado por el lado mexicano. Por lo pronto hay que esperar, esta final puede ser una de las mejores en la historia de la Copa de Oro, porque México ya está seguramente agoviado de perder partidos contra los estadounidenses y porque la selección encabezada por el entrenador Bob Bradley querrá ratificar su supremacía en el área (evidentemente México ya no puede ser catalogado como el gigante porque en caso de haber un gigante en la CONCACAF, hoy por hoy a nivel de selección mayor sería Estados Unidos), sobre los mexicanos y de paso empatar a México como los máximos ganadores de la Copa de Oro con 4 títulos (México: 1993, 1996, 1998 y 2003; Estados Unidos: 1991, 2002 y 2005) por uno de Canadá (2000). Todo está listo para ver un gran juego de fútbol y mi pronóstico es que Estados Unidos gana 2-1 el partido. Espero sinceramente que no sea así y que México juegue a su nivel, porque si lo hace tendrá muchas posibilidades de ser campeón.

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