miércoles, 13 de junio de 2007

El fútbol se juega con los pies, no con las manos.


La palabra inglesa football que se traduce al español como balompié es un deporte que como su nombre lo indica se juega con un balón y se utilizan los pies. Además se pueden usar otras partes del cuerpo como los muslos, el pecho y la cabeza para tratar de meter el balón en la portería del equipo contrario, siempre y cuando no se use la mano ya que cualquier toque con intención de sacar ventaja con las extremidades superiores será marcado como falta. Para la gente que conoce las reglas básicas del deporte más popular del mundo esto es una verdadera obviedad, entonces no me explico cómo un jugador profesional, que juega en uno de los equipos más importantes no sólo de España sino del mundo como lo es el Barcelona, y que está llamado a ser uno de los mejores futbolistas dentro de unos años no sepa que en el fútbol no se puede tocar la pelota con la mano. ¿Verdad Leo Messi?


A pesar de su juventud y su inexperiencia, Messi tiene un hambre de triunfo y una técnica individual de alto nivel que demuestra con jugadas espectaculares en las que puede burlar a prácticamente medio equipo contrario y cerrar esos dribblings impresionantes con un gol como lo hizo frente al Getafe en uno de los partidos de la Copa del Rey de este año pero me parece que el hecho de que a sus 20 años tenga puntadas de crack no justifica que haga trampa y menos en una situación tan cerrada como se vive en el cierre de la Liga Española donde su equipo está disputando el título con el Real Madrid y el Sevilla con una diferencia entre estos tres equipos de apenas dos puntos.


Es una pena que el joven jugador argentino haya quedado ante todo el mundo como un tramposo, porque al igual que Diego Armando Maradona lo hizo en el Mundial de México 86 en cuartos de final frente a Inglaterra, metiendo la mano en un centro elevado para meter el balón ante la salida de Peter Shilton en una clara acción ventajosa y fuera del reglamento, lo de Messi el fin de semana pasado frente al Espanyol en el primer gol de cuadro blaugrana es un claro ejemplo de lo que es reprobable en el fútbol ya que con un cinismo, un descaro y una actitud vergonzosa, el argentino se atrevió a festejar el gol como si fuera lo más normal del mundo. Y lo peor de todo es que ese gol puede ser decisivo para decidir al campeón de España, sin embargo el destino hizo justicia y el Espanyol empató en el último minuto un partido que de haber ganado el Barcelona lo hubiera hecho injustamente por esa acción descarada, además de que hubiera prácticamente sentenciado la Liga.


Así que no se debe confundir una trampa de una genialidad, ni una clara mano dentro del área contraria con la mano de dios (término que le dio por primera vez el polémico comentarista regiomontano Roberto Hernández Jr.) que nada tiene que ver una cosa con la otra. Ojalá Messi recapacité y deje de imitar a Maradona que si bien fue un buen jugador, está lejos de ser un ejemplo para cualquier futbolista tanto profesional como amateur, tanto por sus trampas (manos, quejas, antidoping) como por su conflictiva vida personal, por lo que espero que Messi deje de hacer trampa, deje de imitar a Maradona (¿o que acaso también piensa doparse?) y se ponga a jugar honestamente en el campo de juego, porque el fútbol se juega con los pies, no con las manos. Ojalá esa acción cínica y de trampa no se repita nunca más y menos en una liga tan importante como la española.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tramposo, es la palabra correcta para la joven joya argentina Leo Messi. Ahora si coincido con CASI toda tu columna, mejor por cierto que la primera.

Es una realidad que el fútbol no se juega con las manos, exceptuando por su puesto a los porteros, (así que cuidado con las cabezas de tus columnas) y no hay otra palabra que la que ya mencioné.

Evitar los comparativos con uno de los mejores jugadores del mundo en toda la historia es netamente imposible, sin embargo si es importante contextualizar las situaciones y a ambos personajes.

Diego Armando Maradona vivió una época completamente diferente a la que está viviendo Leo, el fútbol, el contexto y las situaciones son completamente diferentes, aunque eso no justifique la mano ni de uno ni del otro.

Me duele por ser maradoniado, pero lo que si es una realidad es que el mejor jugador del mundo tiene ya por fin un sucesor, se llama Leo Messi y es Argentino, y eso, a los que amamos el fútbol, es de celebrarse, por el simple hecho de ver lo que hace con el balón.

Anónimo dijo...

Yo creo que fué un bonito gol. "Tramposo" no creo que sea la palabra adecuada, porque en un momento de desesperación como ese, lo que menos importa son las reglas.

¿O vas a decir que todo aquel que comete una falta es un tramposo?

Anónimo dijo...

Puede ser momento de desesperación o no, puede que importen las reglas o no, pero están y el no respetarlas es TRAMPA, y no todo el que comete una falta es tramposo, porque existen "n" cantidad de definiciones para ésta.

Coincido en que fue un bonito gol, pero eso no deja de ser trampa, te guste a tí, a Leo, a los árbitros, aficionados o a quién sea, eso es trampa, apoyo mucho a Argentina y a sus jugadores, pero Messi fue por un momento un tramposo, y al final, ni le alcanzó, porque de todas maneras, los culés no fueron campeones...