lunes, 18 de junio de 2007

El Tri juega feo pero gana




Un triunfo sufrido, seco, sin brillo y desgastante, pero después de todo la selección mexicana de fútbol está en semifinales de la Copa de Oro gracias a la victoria que logró sobre Costa Rica por 1-0 en el Reliant Stadium de Houston (casa de los Texanos de Houston de la NFL).




No fue nada fácil derrotar a los ticos porque a pesar de estar casi todo el partido en inferioridad numérica por la expulsión de 3 de sus jugadores (la pimera roja justa, la segunda demasiado dudosa y la tercera roja merecídisima porque iba con toda la mala intención de partirle la cara con los tacos a Blanco), Costa Rica se encerró atrás, no daba espacios y generaba algunos contragolpes peligrosos que estuvieron a punto de meter el balón en la portería de Oswaldo Sánchez como en el remate de cabeza del final del segundo tiempo que pegó en el travesaño y el contrarremate de cabeza salió desviado, haciendo temblar tanto a aficionados mexicanos, como a los organizadores del torneo por el dinero en entradas que genera el Tri, como a las propias televisoras que se hubieran quedado sin el jugoso platillo de semifinal y la probable final. Pero en el primer tiempo extra un gol del mejor delantero mexicano de los últimos tiempos: Jared Borgetti (43 goles como seleccionado) le dio a Hugo la oportunidad de respirar momentáneamente porque hubiera sido ridículo perder contra un equipo tan inferior futbolísticamente hablando, porque aunque Medford (entrenador tico) se llené la boca diciendo que México ya no es el gigante de la Concacaf y que le ganarían fácilmente, lo que demostró Costa Rica fue un miedo enorme por buscar el partido en el campo mexicano, porque estoy seguro de que si hubieran tenido un poco más de ambición, los costarricenses hubieran tenido muchas posibilidades de eliminar a México porque eran dos equipos en crisis y eso se notaba en el terreno de juego.




Otra cosa sumamente criticable del equipo centroamericano y que no debería de ocurrir en un partido de fútbol fueron las patadas, codazos, agresiones y antifútbol que mostró durante casi todo el partido Costa Rica en contra de México. Una cosa es pelear balones divididos con todo, jugar con hombría y tener hambre de triunfo, pero otra muy diferente es jugar sucio, intentar lesionar al rival y buscar ganar de mala forma. En pocas palabras hacer cochinadas y mi predicción se cumplió, el que habla antes de tiempo pierde.




El desempeño colectivo de México siguió mal, aunque se te encierre un rival y te aviente patadas, debes abrirlos con disparos de media distancia, desbordes y jugadas que partan el esquema defensivo del equipo contrario, sin embargo el Tri sigue mostrando una muy mala cohesión entre líneas, no se ve un buen parado táctico y no quiero pensar mal de Hugo o de Egea pero una cosa es que a nivel físico no estés al 100% pero llevan todo el 2007 al frente del equipo mexicano y varias semanas entrenando a los seleccionados por lo que no hay pretexto para justificar esa forma de jugar tan mala. Lo que se puede decir en defensa del pentapichichi es que su equipo se vio menos mal que en otros partidos pero eso no quiere decir que haya desempeñado un mejor juego como algunos señalan. Se debe más bien a las circunstancias del encuentro frente a un rival que si hubiera quedado fuera en primera ronda no pasaba nada. Los únicos rescatables del equipo tico en el partido de cuartos de final contra México fueron el portero Porras y el defensa Drummond. Mientras que por el lado de México se resintieron las ausencias de Castillo y del capitán Pardo, mientras que de destacaron Borgetti por el gol, Oswaldo Sánchez y Ricardo Osorio. Bravo sigue quedando a deber mientras que Bautista se mostró participativo aunque no lo suficiente para pensar que puede ser titular contra Guadalupe.




Ahora que el Tri está en semfinales se debe de mostrar una mejoría pero en serio porque si sigue jugando así no va a ser campeón de la Copa de Oro lo que representaría el primer fracaso en la era de Hugo Sánchez, que debe tener mucho cuidado en no confiarse por el hecho de que su rival en esa instancia no sea Honduras porque el equipo de Pavón fue sorprendido por Guadalupe (selección no afiliada a la FIFA) que es el auténtico caballo negro de la competencia y con un Jocelyn Angloma que rebasa los 40 años jugando a tope puede provocar la campanada del siglo en la Concacaf si llega a dejar fuera a los mexicanos en el partido del próximo jueves en Chicago a las 9 de la noche. El ganador se enfrentará al vencedor del Canadá vs Estados Unidos que se jugará en el mismo escenario pero a las 6 pm.




México está jugando mal, pero desde mi punto de vista el historial del Tri en selección ha tenido tantos fracasos con un nivel de juego aceptable, es decir jugando bien al fútbol que quizá ha llegado el momento de invertir los papeles y jugar feo pero ganar los partidos. Si Hugo Sánchez hace que su equipo sea ganador como lo fue él como jugador y aunque juegue horrible, levanta copas, entonces será justificable. El problema es que Estados Unidos es un rival podeoroso que le tiene tomada la medida a la selección mexicana.




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