Los Patriotas de Nueva Inglaterra son sin duda el equipo dinastía de esta década, así como lo fueron los Vaqueros de Dallas en los 90, los 49's de San Francisco en los 80, los Acereros de Pittsburgh en los 70 y los Empacadores de Green Bay en los 60. Después de ganar los Super Bowls del 2002, 2004 y 2005, y de perder de manera dramática la final de la Conferencia Americana la temporada pasada frente a sus archirrivales los Potros de Indianápolis de Peyton Manning, los Pats iniciaron con todo la temporada 2007, luciendo como una auténtica máquina imparable sobretodo a la ofensiva.
La victoria de este fin de semana de 48 puntos contra 27 que le propinaron en el Texas Stadium a los hasta ese momento invictos Vaqueros de Dallas, demostró que hace falta mucho más que una buena pareja como la de Romo-Terrell Owens a la ofensiva acompañada por una dupla terrestre como la de Marion Barber y Juilius Jones para ponerle freno al equipo de Bill Bellichick. Si hasta este partido, se había criticado el hecho de que llevarán una marca invicta porque habían enfrentado a equipos débiles, en este caso jugaron en el campo de uno de los mejores equipos de la Conferencia Nacional y aspirante a llegar al Súper Tazón en febrero próximo, si es que Washington, Green Bay o Tampa Bay no le ponen un alto antes.
Tampoco le afectó a Nueva Inglaterra el escándalo de hace algunas semanas donde la NFL los castigó con una multa económica por grabar en pleno partido las órdenes que daba el staff de coacheo de los Jets de Nueva York, en algo que sin duda está mal pero que tampoco creo que no haya otro equipo en la NFL que no caiga en ese tipo de actos. Los Patriotas a través de su head coach aceptaron el error y a partir de ese momento han ido en ascenso, metiendo más de 30 puntos en cada uno de sus partidos y con un Tom Brady que ha establecido una nueva marca en la liga ya que en sus primeros 6 juegos de la temporada ha conectado 3 o más veces pase para anotación en cada uno de ellos. En el último lo hizo en 5 ocasiones por lo que ya lleva 20 envíos a zona prometida y apenas vamos en la tercera parte de la temporada regular.
Pero aunque el alma del equipo es Brady, no hay que olvidar a otros jugadores que están luciendo su calidad como el plurfuncional Vrabel, el sorprendente receptor Welker y el mejor receptor de los últimos diez años, Randy Moss quien ha hecho química con el equipo ofensivo de los Patriotas. Sólo quedan dos invictos en la liga, y quizá lleguen sin derrota al primer fin de semana del mes de noviembre donde veremos una nueva edición del gran clásico de la Conferencia Americana de este siglo ya que los Potros de Indianápolis sean probablemente el único equipo capaz de detener a unos Patriotas de Nueva Inglaterra que se ven dominantes, potentes, contundentes y con una mentalidad que los coloca como el máximo aspirante al título.
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